La electricidad es indispensable en nuestras vidas, pero trabajar con ella implica riesgos. Para protegernos, existen 5 reglas de oro que son la base de la seguridad en cualquier trabajo eléctrico. A continuación, te explicamos cada una para que puedas comprenderlas y aplicarlas.
Regla 1. Desconectar la Fuente de Energía
Antes de empezar cualquier trabajo, es fundamental cortar el suministro de electricidad. Esto se hace desconectando la fuente de energía del equipo o circuito en el que se va a trabajar. Este paso evita que la corriente fluya accidentalmente, eliminando el riesgo de choques eléctricos.
Regla 2. Bloquear y Señalizar la Desconexión
Una vez desconectado el equipo, asegúrate de que no pueda volver a encenderse accidentalmente. Esto se logra usando un sistema de bloqueo (como un candado) y colocando una señal de advertencia. Este paso se conoce como «Bloqueo y Etiquetado» (Lockout-Tagout) y asegura que nadie más reactive la corriente sin darse cuenta.
Regla 3. Verificar la Ausencia de Tensión
Aunque el equipo esté desconectado y bloqueado, es esencial confirmar que no hay corriente en el circuito. Usa un dispositivo de medición, como un tester o multímetro, para asegurarte de que no hay tensión. Este paso es vital, ya que garantiza que el lugar de trabajo está completamente seguro.
Regla 4. Realizar la Puesta a Tierra
Para añadir una capa adicional de seguridad, se debe hacer una conexión a tierra en el circuito o equipo en el que se trabaja. La puesta a tierra drena cualquier carga eléctrica residual que pudiera haber quedado, protegiendo a quien esté realizando el trabajo.
Regla 5. Proteger y Delimitar la Zona de Trabajo
Finalmente, asegúrate de delimitar el área donde se realizará el trabajo. Coloca señales y barreras para evitar que personas no autorizadas se acerquen. Este paso es importante para reducir el riesgo de accidentes, protegiendo tanto al trabajador como a las personas alrededor.